El capital riesgo, una alternativa para diversificar las carteras de inversión
En los últimos años venimos observando el interés que despiertan en los inversores los productos de inversión alternativa y capital riesgo. Han entrado a formar parte de las vías para la planificación patrimonial, las cuales han evolucionado para incorporar estas estrategias más acordes con el panorama actual, dejando atrás otros planteamientos más tradicionales. En muchas ocasiones, estos activos están resultando una pieza clave en la estructuración de las carteras de inversión, pero la decisión de incluirlos o no necesita un análisis detallado de cada inversor o grupo familiar, así como el asesoramiento experto, no solo para la selección del producto, sino para la confirmación de que cumple con los objetivos patrimoniales y familiares.
Son varios los factores que han contribuido al auge de dichos productos y su incorporación en las carteras. Por un lado, la flexibilización de la normativa para dar acceso a prácticamente todo tipo de inversores, bajo determinadas condiciones, a estas oportunidades de inversión que antes estaban limitadas a aquellos más cualificados. Por otro lado, las ventajas que, desde el punto de vista fiscal, ofrecen algunos de estos productos de inversión, lo que maximiza su rentabilidad.
Teniendo en cuenta la fiscalidad de las inversiones, no podemos obviar que el capital riesgo es el que se ve principalmente beneficiado por el régimen fiscal especial que acompaña a este tipo de vehículos y por la fiscalidad asociada a algunos de sus inversores, sobre todo en aquellos supuestos en los que nos referimos a los instrumentos de inversión del capital riesgo español. Además, no pueden obviarse los beneficios a los que se podría tener acceso en relación con el Impuesto sobre el Patrimonio o el Impuesto temporal de Solidaridad de las Grandes Fortunas y, por consiguiente, también en el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones. Este, sin duda, es uno de los aspectos que ha contribuido a despertar el interés de los inversores por este tipo de inversiones.
No obstante, la inclusión de productos de capital riesgo y otros activos alternativos en las carteras es una decisión estratégica que requiere una evaluación detallada de la situación concreta de cada inversor o grupo familiar. Estamos de acuerdo en que la planificación patrimonial tiene por objeto optimizar la gestión de los recursos para alcanzar los objetivos financieros y preservar el patrimonio para su transmisión a las futuras generaciones. Esta meta está en línea con este tipo de activos con inversiones a largo plazo y rentabilidades elevadas, pero también implica riesgos que es necesario conocer y evaluar. Es por ello por lo que antes de la incorporación de dichos activos será necesario hacer una evaluación previa, tanto del inversor como del tipo de inversión que se quiere proponer.
Algunos de los aspectos que se deberían considerar son el horizonte temporal, la tolerancia al riesgo, el grado de conocimiento del inversor sobre este tipo de inversiones y el peso que deben tener en las carteras.
Las inversiones alternativas, como puede ser el capital riesgo, por su propia naturaleza, conllevan generalmente plazos de inversión largos relacionados con la maduración de sus inversiones, por lo que las necesidades de liquidez a corto plazo deberán ser correctamente analizadas. Igualmente, habrá que evaluar el nivel de tolerancia al riesgo del inversor. Por todos es conocido que, en muchas ocasiones, este tipo de productos, no siempre sencillos de entender, llevan aparejado un riesgo mayor que los activos más tradicionales, por lo que dicha evaluación de riesgo junto con la de conocimiento del inversor serían ineludibles. Por último, habrá que determinar el peso que dichos activos deberían tener en la cartera en función de los criterios analizados, así como el importe que será necesario invertir para conseguir una correcta diversificación.
En resumen, la inclusión de productos de capital riesgo y otros activos alternativos en las carteras desde el punto de vista de la planificación patrimonial debe basarse en una evaluación cuidadosa de todos los factores mencionados. Trabajar las mismas siempre de la mano de un profesional y con la máxima información posible resultará fundamental para una inversión exitosa en estos activos de inversión alternativa.
Publicado en Citywire, 03.04.24