El mercado registró un descenso considerable en una semana acortada por las vacaciones. El S&P 500 cayó un 4,3%, el Nasdaq perdió un 5,8% y el Russell 2000 un 5,7%. La amplia actividad vendedora llevó al S&P 500 a caer por debajo de su media móvil de 50 días.
Los temores a un debilitamiento del mercado laboral y de las perspectivas de crecimiento económico desencadenaron el movimiento bajista. La publicación el viernes del informe de empleo de agosto aumentó los temores del mercado. La actividad de contratación fue menor de lo esperado en agosto y hubo revisiones a la baja en julio y junio que dejaron el empleo 86.000 menos para esos meses de lo que se había informado anteriormente. El informe también mostró que la tasa de desempleo disminuyó ligeramente y que los ingresos medios por hora aumentaron un 0,4% intermensual más de lo previsto.
Los únicos sectores que cerraron al alza esta semana fueron el inmobiliario, sensible a los tipos (+0,2%), y el de bienes de consumo básico (+0,6%). El sector tecnológico cerró la semana con una caída del 7,1%. Fue el sector con peores resultados, seguido de la energía (-5,6%), los servicios de comunicación (-5,1%) y los materiales (-4,8%). La debilidad de los semiconductores contribuyó en gran medida a las pérdidas del sector tecnológico. El índice de semiconductores PHLX (SOX) cayó un 12,2% la semana pasada. Broadcom (AVGO) fue uno de los nombres más destacados del sector, con una caída del 15,9% tras unas previsiones relativamente decepcionantes que se sumaron a los temores actuales de que el ritmo de crecimiento se esté ralentizando para muchos valores relacionados con la inteligencia artificial. El rendimiento del bono del Tesoro estadounidense a 10 años bajó 20 puntos básicos, hasta el 3,71%. El rendimiento de los bonos a 2 años bajó 28 puntos básicos, hasta el 3,65%.